El objetivo de la conmemoración es reivindicar el «orgullo LGTB»: ninguna persona debe avergonzarse de lo que es, defendiendo el derecho de vivir nuestra sexualidad libremente. La bandera LGBT, popularizada desde 1978 en los eventos de demostración del Orgullo, es la versión de la bandera arcoíris más conocida, y simboliza la diversidad sexual de la comunidad.